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Acaip denuncia cuatro incidentes en la Prisión de Córdoba este pasado domingo

Fuente: ABC

Uno de los internos del módulo 13 reventó con una barra de hierro los cristales de un búnquer.

El centro penitenciario de Córdoba vivió ayer, domingo, una situación difícil tras registrarse hasta cuatro incidentes distintos con reclusos, que, según el delegado del sindicato Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) en la cárcel cordobesa, Ramón Ochoa, «no tuvieron relación unos con otros, ya que se produjeron en módulos diferentes, pero sí han coincidido en un día en el que hay menos personal de funcionarios y ellos lo saben».

 

El más grave de todos tuvo lugar en el módulo 13, cuando el interno B.R.L., de origen israelí, arrancó una barra de hierro de una de las porterías de fútbol-sala que hay en el patio y atacó los cristales blindados del búnquer de funcionarios hasta que los reventó. Finalmente, el recluso, quien solicitó al resto de sus compañeros que le apoyaran en su acción violenta, pudo ser reducido y acabó aislado. «Ese hombre un lunes no hubiera montado esa escena, porque sabe que hay más personal», ha apuntado Ochoa.

Una pelea entre dos reclusos del módulo cinco, en la que resultó agredido en la mano uno de los funcionarios que medió en la reyerta, así como el hallazgo de una bellota de hachís a otro del módulo 8 y, finalmente, otro incidente más en el módulo 9, remató una jornada «movida y que sólo se ha repetido e una ocasión anterior», ha abundado el representante sindical.

Según Acaip, este tipo de situaciones se da cuando el personal funcionario se reduce por la aplicación de recortes por parte de la Administración, «entre dos y cinco trabajadores menos por turno», frente a la cada vez mayor masificación del centro de Alcolea, que inicialmente fue construido pensando en una población reclusa de 1.008 personas, aunque la semana pasada alcanzaba los 1.541 internos. «De ese modo, los riesgos para nosotros son cada vez mayores, al tiempo que se genera malestar entre la población reclusa», ha advertido Ochoa.

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